La sentencia contra Echenique y Del Olmo, un publirreportaje que beneficia al despacho de Bárbara Royo

Bárbara Royo, pareja de Nacho Abad, ambos conocidos por su participación en el programa de Susanna Griso, dedican su actividad televisiva a desgranar crímenes. Él como portavoz, ella, como abogada defensora en los más cruentos

Publicaba ayer El Confidencial la noticia de la condena de la jueza, Blanca Grand Delgado, que exigía a Pablo Echenique y Juanma del Olmo una indemnización nunca antes vista en una intromisión contra el honor. 80.000 euros por un tuit y una declaración pública. Sorprendían las cifras, la decisión de la jueza –que fallaba en contra del criterio de la Fiscalía– y el momento elegido para dictaminar la sentencia.

Sin embargo, atendiendo a las pesquisas que rodean el caso, existen una serie de coincidencias. Bárbara Royo, conocida por ser la abogada de José Bretón por propia elección del asesino, lo es también de los denunciantes que interpusieron la demanda contra los miembros de Podemos. Y su marido, Nacho Abad, es columnista habitual de El Confidencial. De hecho, la propia exclusiva está firmada por él, en la que no duda en publicitar los servicios de su pareja, realizando una mención tan extensa como elaborada de su bufete donde se jacta, incluso, de la escandalosa sentencia. “Una de las más altas en España en este tipo de demandas de intromisión ilegítima contra el honor”, se puede leer en el publirreportaje.

¿Quiénes son, por tanto, Bárbara Royo y Nacho Abad?

BÁRBARA ROYO, DEFENSORA DE ASESINOS

La abogada no es solo conocida por defender a José Bretón, asesino condenado a prisión por quemar a sus propios hijos, también ha participado en otros casos famosos por la crueldad de los hechos. Fue la letrada que enarboló la defensa del asesino confeso, Patrick Nogueira, en el crimen de Pioz, que se saldaba con la muerte de sus sobrinos y sus tíos.

En una revisión de la hemeroteca, se pueden encontrar una cantidad considerable de artículos que critican la actitud de Royo durante el juicio. En La Crónica de Guadalajara, se podía leer al respecto de las llamadas de atención que la jueza se vio obligada a emitir: “Les ha instado de forma repetida a no introducir alegatos ni valoraciones, porque se trata de la prueba pericial. Las peticiones a instar abundaban en que dejara hablar a los peritos a los que a su juicio, estaba demostrando «continuamente una falta de respeto». «Su comportamiento, ante la imagen externa y ante el jurado, deja mucho que desear», ha apostillado la jueza en referencia tanto a Royo como a Martín”.

Añadido a ello, por sus manos han pasado los casos de los narcotraficantes gallegos conocidos como “Los Charlines”, así como el caso Arriate, donde una familia murió apedreada, o el caso Roquetas, en el que se investigaba la muerte de un agricultor dentro de un cuartel de la Guardia Civil. Incluso, llegó a jugar un papel en el procedimiento del proceso contra el confidente de la investigación sobre Marta del Castillo.

EL PAPEL DE NACHO ABAD

Nacho Abad, tertuliano habitual de Espejo Público, conforma la otra parte fundamental del rentable tándem. Ambos han construido su fortuna al amparo de la colaboración asidua en el programa de Susana Griso, donde su papel es desgranar las minuciosidades de los casos que la propia Royo lleva.

De hecho, uno de los motivos que apuntan al abandono de la colaboración que Abad ostentaba en el matinal de Ana Rosa refieren a la duplicación del salario que le ofrecían en el programa de su competencia directa.

La pareja, ha sabido sacarle partido televisivo y rédito económico a sus respectivas profesiones. La publicidad que les ha brindado los medios de comunicación es una inefable seña de identidad que suma puntos al haber de la letrada.

Cabe esperar que en el primer recurso que presentarán los abogados de Pablo Echenique y Juanma del Olmo se eche para atrás la sentencia, sin embargo, el ataque a la reputación de los miembros de Podemos es un hecho patente. Lo que no deja lugar a duda es que el despacho de Bárbara Royo ha conseguido una gran publicidad.